Primera parte: Danke Herr Sinn: el señor Sinn (I)
Helmut Sinn, el piloto que aprendió a volar sin instructor de vuelo, también aprendió el oficio de la relojería sin maestro. Tras acabar la Segunda Guerra Mundial Sinn no tenía trabajo y vivía una situación difícil. Para poder sobrevivir compraba relojes de Cuco de la Selva Negra y los vendía en Fráncfort del Meno. El negocio le fue bien y llegó a tener una tienda de relojes llamada BASI.
De esa experiencia aprendió mucho, y ya en su período en Suiza hacía sus propios bocetos de relojes. Años después diseñaba relojes y los mandaba a fabricar con su nombre a Guinand, una empresa suiza ubicada en Les Brenets (Suiza) con mucha experiencia en cronógrafos. Guinand fue un socio clave durante toda la trayectoria profesional de Helmut Sinn, que según él trabajó con con ellos desde 1953. Guinand compraba los componentes de los movimientos (ebauche) sobre todo a Valjoux, los mejoraba y los montaba.
Helmut Sinn emprende su segunda aventura en el mundo de los relojes y funda Sinn-Spezialuhren en Fráncfor del Meno, una ciudad sin tradición relojera. Para no concurrir con su antiguo negocio BASI de relojes llegó al acuerdo de que Sinn solo se dedicaría a la fabricación de instrumentos para profesionales. En 1961 transformó su empresa personal en una GmbH (una sociedad de responsabilidad limitada o S.L.). Por eso 1961 es el año de fundación de Sinn-Spezialuhren, aunque hay relojes Sinn desde por lo menos 1955.
http://s42.radikal.ru/i098/0905/53/d054dc447720.jpg * Reloj Junghans Bo-UK 1
Sinn era un autodidacta que estudiaba todo lo que podía. Analizó, por ejemplo, los relojes Breitling y concluyó que no eran una buena opción en cuestión de funcionalidad y legibilidad. Logró inmiscuirse en el negocio de Junghans y otras empresas relojeras con más experiencia.
- Reloj Sinn NaBo 16. Es una propuesta más grande que la de Junghans y que mejora la legibilidad.
Se dio cuenta de que los relojes de abordo estaban todos basados sobre calibres viejos y que tarde o temprano tendría que venir algo nuevo. Así desarrolló su primer reloj de abordo sobre un calibre Valjoux VJ5 y lo vendió como reloj para rallys. Sinn no se caracterizó por querer romper el mercado, ni mucho menos. Se propuso hacer el mejor reloj posible para pilotos, y para ello introducía pequeñas innovaciones.
http://s019.radikal.ru/i624/1203/d3/6d82f75f892d.jpg * Sinn NaBo 17 ZM
El mismo concepto de legibilidad de los relojes de abordo lo llevó a los relojes de pulsera y el éxito de los relojes Sinn fue casi inmediato entre los pilotos profesionales. Las características esferas negras con números y agujas blancas hacían de estos relojes buenas herramientas.
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- Sinn NaBo 17 y Sinn 656. A pesar de los años que hay entre los dos relojes se ve que Sinn sigue siendo fiel a su propuesta de reloj-herramienta.
Y el modelo de negocio basado en la venta directa hizo que el precio fuera muy competitivo. Curiosamente fue el mismo mercado relojero el que hizo que Sinn actuara de esta manera. Los vendedores de relojes le pedían rebajas mayores al 33%. Tuvo claro que sus relojes los tenía que vender él mismo.
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Tampoco hizo publicidad pero recibió atención de la prensa y el boca-oreja hizo el resto. Recibía los pedidos por carta o teléfono. Relojes para pilotos hechos por un piloto. No pasó desapercibido para la televisión y le dedicaron varios programas. Su éxito llegó hasta Japón, donde en estos primeros años ya era un mercado que representaba un tercio de su negocio anual. Sinn-Spezialuhren vendía entre 10.000 y 12.000 relojes en el país del Sol naciente por un valor de unos 5 millones de marcos alemanes.
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- Un Sinn 103A de 1966 con un calibre Valjoux 72
El astronauta austriaco-alemán Reinhard Furrer llevó en 1985 un Sinn 140 S PVD con calibre Lemania 5100 en la misión Spacelab D1.
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Cabe destacar que el reloj se lo había comprado él mismo, lo cual forma parte de la tradición de Sinn-Spezialuhren. Siempre han sido relojes muy queridos por los profesionales.
http://www.sinn.de/bilder/uhr/b_300/140-St-S_V.jpg * Este es un Sinn 140 St S conmemorativo del reloj llevado por Furrer.
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- El astronauta Klaus-Dietrich Flade en la misión Mir-92 de 1992 con un Sinn 142 S.
Para aprender más: Sinn in Space: The 140/142 Chronographs
Los relojes Sinn han sido usados por diversas compañías aéreas para sus aviones hasta épocas recientes (Bell UH-1 D, Alpha Jet , F-104G , F-4E, Tornado, Euro Fighter)
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- La cabina de un Panavia Tornado que combatió en la Guerra del Golfo de 1991. El reloj Sinn está a la derecha del todo.
Con Helmut Sinn a la cabeza, Sinn funcionó siempre de manera similar. En los noventa seguía vendiendo de manera directa, la tienda estaba al lado del despacho de Helmut Sinn en la última planta del edificio en Fráncfort y apenas trabajaban 3 maestros relojeros.
Lothar Schmidt
En 1994, con 78 años, Helmut Sinn decidió vender su empresa a Lothar Schmidt, un ingeniero de éxito que trabajó en empresas como Bosch e IWC, en la que estuvo 12 años. Antes, y sobre todo durante su período en IWC, Lothar Schmidt experimentó con varios materiales para las cajas como el titanio, en una época en la que este material todavía no había llegado a la relojería, el oro o el dióxido de circonio, consiguiendo varios éxitos para IWC.
Schmidt y Sinn se conocieron en 1982, cuando el ingeniero empezaba a trabajar para IWC. Sinn era un autodidacta que llevaba una empresa familiar de éxito pero ciertamente modesto en sus pretensiones empresariales, Schmidt era un ingeniero entregado al estudio y ambicionaba tener su propia empresa. Los dos mantuvieron el contacto a lo largo de los años.
- Las cajas de los IWC Grand Complication son un desarrollo de Schmidt. Se tuvo que emplear a fondo para conseguir un material que no distorsionara el característico sonido de estos relojes.
En 1991 Schmidt recibió el encargo de montar la producción para la nueva A. Lange & Söhne. Pero esta vez no viajó a Glashütte solo como ingeniero, sino como uno de los responsables del renacimiento de A. Lange & Söhne. Schmidt presentó su dimisión a IWC en 1993 para irse a Sinn-Spezialuhren, cosa que al director de Les Manufactures Horlogères (el conglomerado compuesto por IWC, VDO y la nueva Lange) no le hizo gracia, comentándole que él pudo haber comprado Sinn.
En tiempos de Helmut Sinn, Sinn-Spezialuhren siempre fue una empresa relativamente pequeña, pero Schmidt supo ver el potencial de la misma. Nada más se formalizó la compra de Sinn-Spezialuhren en el otoño de 1994, empezaron los cambios y llegaron nuevas innovaciones.
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- Sinn 244 fue el primer modelo de la marca con una protección antimagnética.
Cuando Schmidt llegó la leyenda “Swiss made” estadaba en los relojes Sinn, cosa que no le gustaba. “Wir zeigen den Schweizern, dass wir auch Uhren bauen können”, “Enseñamos a los suizos que también podemos hacer relojes”. “Made in Germany ist ein Zeichen von Authentizität”, “Made in Germany es una señal de autenticidad”.
En 1998 funda la empresa Sächsische Uhrentechnologie GmbH Glashütte (SUG) junto con dos socios, que no es más que una “manufactura” de cajas para relojes. Es decir, una empresa que investiga y desarrolla cajas para relojes.
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- Tres versiones del ya clásico U1 y un U2, con sus innovadora caja hecha en acero de submarino.
Una muestra de este cambio son los modelos de la línea Frankfurter Finanzplatzuhr lanzada en 1999 con su “Made in Germany” y el nombre de la ciudad “Frankfurt am Main” por primera vez en un reloj. Hay que recordar que Sinn-Spezialuhren fue desde el principio una rara avis en la pequeña ciudad de Fráncfort, que siempre ha sido famosa por otras cosas. Incluso hoy en día lo sigue siendo.
http://www.montreapart.fr/contents/media/sinn_6090_f_lb.jpg * Sinn 6090 del 2012
La empresa cambió por dentro y Lothar Schmidt le imprimió una nueva imagen de marca. Sinn-Spezialuhren fue desde sus inicios una empresa enfocada en la innovación, pero Helmut Sinn siempre trabajó con un equipo pequeño y con unos principios muy claros, mientras a Schmidt le gustaba tratar con catedráticos de física, visitar empresas de otros sectores como la automoción, etc. para enterarse de las últimas novedades y buscar nuevas ideas. Al llegar Schmidt se empezó a terminar relaciones con los socios que le suministraban los componentes (casi todos suizos) y empezó a fabricar en casa o a comprar a suministradores alemanes. Nuevos trabajadores, nuevos ingenieros, computarización en todo el proceso de producción. Sinn-Spezialuhren pasó de facturar unos 3 millones de marcos alemanes en 1993 a 9 millones de euros en 2004.
A pesar de los cambios hechos por Schmidt, Sinn sigue una línea más o menos continua en sus diseños. Siempre respetando la legibilidad e innovando en los distintos elementos.
http://www.sinn.de/bilder/uhr/b_300/756_V.jpg* Sinn 756
Las lista de innovaciones y nuevos materiales empleados por Sinn desde la llegada de Schmidt es bastante amplia. Casi cualquier reloj valdría como ejemplo, aquí un Sins UX GSG 9.
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Un reloj que reúne las viejas características de legibilidad de los relojes Sinn, al mismo tiempo innovador y que es usado por profesionales. Está certificado por la unidad de operaciones especiales contraterrorista de la Policía Federal Alemana. La caja está hecha con acero de submarino, que es 7 veces más resistente que el acero, tiene un cuarzo termocompensado, antimagnético, antigolpe y tiene una visibilidad (casi) perfecta al estar relleno de un aceite que no permite la reflexión de la luz, lo que lo hace al mismo tiempo virtualmente sumergible a cualquier profundidad.
Fuentes:
