Qué te voy a decir yo…
Ese fue mi único reloj durante casi 15 años. En un entorno rolexero (rolex el papá, rolex la mamá, rolex el hermano…), el nene se encaprichó por el Speedmaster desde muy joven y, años después, se presentó en la boutique de París y dijo “Quiero un Speedmaster”, para quedarse perplejo cuando la amable dependienta le respondió “Ya, pero ¿cuál?”. El entorno rolexero era también un entorno muy relojero, pero a un servidor los relojes no le interesaban un pimiento. Para mí “el reloj” era el Speedmaster, pero no podía sospechar que los muy paganos de Omega hubieran hecho varias versiones del “Grial”, como se dice por los foros. El caso es que la dependienta, además de amable era compasiva porque, viendo que no tenía ni la más mínima idea, me orientó hacia el Reduced por ser automático (supongo) y porque le iba muy bien a mi muñeca (corría el 1999 y todavía no había nacido el concepto “paellera”).
Hace no mucho, estuve detrás de un Speedmaster 57 Replica (3594.50) y, cuando fui a probármelo e intenté remontarlo, la corona me pareció tan infernal (no recuerdo dónde lo conté) que agradecí muchísimo los consejos de aquella dependienta parisina.
Exactamente trece años y medio después de comprarlo, consideré que había llegado el momento de hacerle una revisión al Reduced. Hasta ese momento, solo había tenido que cambiarle el plexy después de una castaña que le di a los dos años de tenerlo.
¿Fragilidad? Primera noticia.
El caso es que, lo que son las cosas, después de hacerle la revisión y de pagar religiosamente los 400 euros de rigor, me lo puse un par de veces para comprobar la marcha y… al cajón, de donde no ha vuelto a salir.
Es que, como no me apetecía estar sin reloj mientras me lo revisaban en Omega, tuve la ocurrencia de entrar en los foros para asesorarme y comprar otra pieza. Después del segundo vino el tercero, luego el cuarto… y más tarde las manías (hace rato que descarté los cronos). Y ahora que tengo una docena extraño los días en que reloj no había más que uno. :grimace:
En fin, menos mal que al menos descubrí Seiko por el camino…