Muy bonito, en la línea sobria de otras marcas, pero bonito y elegante.
En cuanto al tema de la ISO, puede chocar, pero es que es así, solo los certificados ISO pueden considerarse como tales, y solo estos pueden llevar la leyenda “diver” en su caja o dial. Es cierto que para obtener la certificación ISO hay que pagar, pero no solo eso, si no que los relojes son sometidos a determinadas pruebas para obtener el certificado. La certificación ISO garantiza que sus productos certificados cumplen unos estándares internacionales, que en el caso de los divers son para relojes de buceo.
Por otro lado, hay relojes con estética y funcionalidad de diver que no cumplen con todos los requisitos para poder ser un diver certificado, pero que se les llama divers. Por ejemplo, los Longines LD e Hydroconquest, que a pesar de ser relojes 300m, corona roscada, bisel unidreccional, etc, les faltaría, entre otros, el requisito de que se pueda comprobar que están funcionando a oscuras, ya que no llevan lumen en el segundero. Y también hay relojes que cumplen con todas las características que exige la ISO, pero que a la marca, por lo que sea, no le interesa certificar, como el Sub, los Omega SM, PO, los Tudor BB, etc, etc; los cuales sí pueden considerarse divers de manera extraoficial, pero no en el pleno sentido de la palabra. Es un terreno difuso, la verdad.
Es lo mismo que el tema del COSC. Hay relojes que salen ajustados de fábrica mejor que el COSC, pero solo los COSC (previo pago y paso de determinadas pruebas) pueden llevar en su dial la leyenda “chronometer”, ya que están certificados por ese organismo. En este sentido, hay marcas que tienen sus propias “certificaciones”, como Omega y su certificado METAS, o Rolex con el Superlative Chronometer (que combina con el COSC).
Al final es un tema de qué intangible le interesa más a la marca. A algunas les interesa más ser divers certificados, y otras prefieren hacia el tema de la precisión de sus calibres.