El autor es un apasionado de los SEIKO de los 60 y 70. Pero pocos de los SEIKOs contemporáneos han llamado su atención, aunque este “SpeedTimer” sí despertó su interés.
Complace a la vista, además de ser un reloj bueno y confiable, pero desafortunadamente mucho en él decepciona: el calibre, el brazalete y los acabados, principalmente. Por €680, el autor habría esperado algo más de SEIKO.
El legendario “SpeedTimer” de 1969 no se merecía esta reencarnación, sino la versión mecánica azul que acaba de lanzar el gigante nipón, aunque esa increíble pieza cuesta €3.200.
Yo llevo una semana con él, y me tiene hipnotizado, es precioso y muy cómodo. Respecto al brazalete, no lo veo tan malo como dice el autor (he tenido el spb149 de 1.500€ y no era mucho mejor, aunque los end links de este son infames…) pero sólo tiene 2 puntos de microajuste , y los puñeteros casquillos te vuelven loco para ajustar. Además, cualquier correa le queda genial.