Visto por ahí un precioso cronógrafo racing… que si, tiene al orejudo favorito de todo el mundo con casco de piloto clásico, y un volante en sus guantes.
El reloj tiene un movimiento Eco-Drive B620, caja de 44mm con resistencia de 100M al agua, y una correa de piel y nylon con pespuntes rojos.
El modelo es el Mickey Racer](Mickey Racer Black Dial Leather Strap CA4439-07W | CITIZEN) con referencia CA4439-07W y parece haber sido diseñado por un tal Jeff Shelly, que debe ser alguien en Disney. En concreto, durante 28 años, el director de arte de Disney.
Ésta sería la presentación.
El caso es que parece que lleva un año por ahí en los escaparates (americanos), y debe quedar una única unidad libre por el Amazon del otro lado del charco, que se quedaría a unos 315 euros puesta en casa con el arancel prepagado.
Son días de recogimiento espiritual. Que alguien tenga caridad cristiana y me lo quite.
Estás pagando el doble por la cara de Mickey. Cristal mineral y un movimiento eco-drive normal y corriente. Y ni siquiera es bonito. No merece la pena.
Hola!.
EMHO, pienso que tal y como lo planteas, la balanza está muy, pero que muy horizontal.
Todo depende del gusto que le tengas a los diseños exclusivos y tu gusto en concreto por Disney, que me parece que te apasiona (o eso me ha dado la sensación) + otro componente, que es tu economía.
Yo, en mi caso, ni de guasa pago tanto dinero por ese reloj. Primero, porque no lo tengo (jajajaja) y segundo porque (en estos momentos) tengo otras prioridades que no son relojeriles.
Fuera de “coñas”; aunque tuviese dinero tampoco lo compraría. Mi gusto por lo exclusivo lo tengo por otras cosas que no son los relojes, aunque si llegase el caso, tampoco le haría ascos a uno en particular si se presentase la ocasión (Zenit el primero 1969, por ejemplo). Lo que sí, es el gusto por Disney, que por cierto el mío es casi nulo, ni me va pagar más por algo que sólo cambia por alguna temática y menos de Disney… Cada uno sus manías.
Yo haría una cosa que te propongo:
Cuando a mí me pasa algo parecido pienso en otro artículo que también me gustaría tener (osea, que no sea un reloj) y sopeso el precio de más por la temática y exclusividad. Creo que me he explicado más o menos. Así sabrás si realmente “no podrías vivir recordando haberlo podido tener”.
Suerte en la decisión.
Un saludo.