Mi amigo Super8 recomendó hace una semana (día arriba, día abajo) uno de los relojes de la casa afincada en Singapur ARIES GOLD. Uno que tenía la esfera fabricada con material de un meteorito caído en Zaragoza y que los de ARIES se apresuraron a comprar para fabricar esferas sobre movimientos NH36A en cajas preciosamente pulidas con biseles que me recuerdan enormemente al del Seamaster 300 original.
Fue verlo y desearlo. Y más con el código del 50% de descuento que nos facilitó Super8. Por 160€, en casita. No podía decir que no.
¡Qué pena la lacra de la aduana!, a pesar de dejarles claro a los de ARIES que bajo ningún concepto me enviasen el reloj por agencia y menos con los chungos de DHL, tuve mi peseta y media particular: Por agencia y por DHL. Tuve que pagar 76€ del vellón que aun me duelen. Y DHL todavía no me ha mandado la factura de aduanas. ¡Cómo les odio!.
Volvamos con el reloj:
El paquete llegó sin la factura del reloj, que la tendrá DHL, porque la debieron de usar para cargar el valor de la tasa. Se la he reclamado.Veremos. Mal empezamos. Sigamos.
Abro la cubierta exterior de cartón corriente y aparece una caja de cartón de alta calidad muy refinada. Me choca. La cosa cambia. Para bien.
Ahora a ver qué hay dentro. Por la pinta, seguro que algo muy bonito. Sigamos. Me encuentro, bajo un paño de burbujas finas, con una caja de madera coronada por una superficie superior de terciopelo azul.
Me encanta. Dejemos que la magia de esta Matrioska haga su labor. Se va abriendo…
… Y aparece su preciado contenido. Una bolsita de silicagel (jajaja), una tarjeta de garantía con fecha de comienzo 27’diciembre (todo un detalle) y bajo numerosos brillos veteados de azul, ¡el reloj!. Fascinante.
¡Qué brillos, la leche!. Y todavía no he quitado el plástico al cristal…
De paso, veo que he pagado casi la mitad de su precio normal. Una sonrisa maléfica mueve mis labios y el disgusto de la aduana y de la factura ausente se atenúan.
Han pensado hasta el más mínimo detalle.
La caja está perfectamente pulida, y la corona firmada.
Fondo visto. Lo había olvidado.
¡Qué brillos!. Os aseguro que hipnotizan.
Aunque la luminosidad en la oscuridad es increíble y la lectura es perfecta, como en otros relojes de este segmento, el efecto dura poco, sobre una hora. Mi ETERNA Kontiki bronce y otros duran toda la noche, pero son precios muy superiores.
Debo decir que la correa, aparte de cómoda, es de altísima calidad. Cuero italiano. No sé cómo han cuadrado ese extra en el PVP, no digo ya en la chocoferta que me he llevado.
En la web era bonito. En mis manos aún más. En la muñeca es increíble. De los relojes más adictivos que tengo y una de las grandes compras de este año. Y eso que han entrado varios pesos pesados. Pero este reloj ME GUSTA. Aunque es graaande (43,5mm sin corona, 47mm con corona) y mi muñeca no, es cómodo y ni te enteras que lo llevas. La correa también ayuda. Sólo me acuerdo cuando, cada poco, me pongo a mirarlo sin ver la hora.
Y eso es todo. Gracias por vuestro tiempo y hasta otra compra. Y gracias, Super8. Por tus consejos y sobre todo por tu amistad. Como siempre, un abrazo.