Cuando hablamos del Power Design Project hablamos de un proyecto muy especial, nacido en el año 2002 y que pretende a responder a tres preguntas básicas, ¿qué es el tiempo? ¿qué es un reloj? y ¿qué es Seiko? es decir, pretende encontrar los puntos más fundamentales de sus 128 años haciendo relojes, la esencia de la marca. Para ello, han hecho un buen puñado de prototipos que den lugar a las nuevas colecciones de la marca basándose en la opinión tanto de sus propios técnicos como de clientes y profesionales del sector.
Cada año aparece una nueva colección de este proyecto con nuevas propuestas, pero siempre persiguiendo el mismo fin, un reloj que, aunque las personas, las ciudades, las modas y los tiempos cambien, permanezca intemporal.
El protagonista de esta historia es uno de estas propuestas que con el tiempo han devenido en un modelo comercial, el Spirit SBPG001/3 (el 003 sólo indica el acabado en PVD), aparecido en el mercado en el último trimestre de 2008, el cual tiene su raíz en el Digital Watch de la colección de prototipos del Power Design Project en el año 2006 y que fue bautizada como Standard. Con este reloj se resucitaban los relojes digitales que un tres de décadas atrás revolucionaron el mercado y que tras unos cuantos años en la cresta de la ola dejaron lugar a otras tendencias enfocadas a relojes analógicos. El prototipo era la viva imagen de sus antecesores, aunque las líneas maestras del SBPG001 estaban bien definidas en él:
La versión definitiva tiene no pocos cambios con respecto a esta primera idea, la caja se redondea y ensancha, el display pierde texto impreso y lo que muestra se recoloca para darle una disposición más en consonancia con las nuevas formas de una caja que matiza todas sus aristas salvo cuatro que conforman los contornos de la pantalla. Pese a todo ello el aire de familia es innegable.
Como la mayoría de las colecciones “interesantes” de la marca, es un reloj que no está disponible para Europa, así que comprarlo supone recurrir a tiendas japonesas y pagar los 31500 yenes que marca la tarifa 2008-2009 de la casa. En mi caso se lo encargué al amigo Seiya que no pudo evitar, pese a poner que el reloj era un regalo, que me lo parasen en la aduana y tuviese que abonar el preceptivo porcentaje que se queda la Agencia Tributaria. Tras ese pequeño disgustillo, abrir una caja de cartón y quitar un plástico de protección aparece una caja blanca con el logotipo de Seiko y empiezo a pensar que me han mandado una muñeca rusa en forma de cajas, pues tras abrir la caja blanca aparece otra gris, pero no, esta es la última, una discreta caja gris de cartón hecha con el habitual cuidado que pone Seiko en ellas:
Por fin dentro viene el objeto de todo este asunto abrazado a un cojín en un color que mi vista de 16 colores define como marrón claro y que en opinión de cualquier dama tendría un nombre mucho más exclusivo:
Una vez abierto pasamos a explorar las funciones del módulo S760 que se nos indican en la tapa a presión de la caja:
La primera de ellas es la hora normal, que en la pantalla nos muestra la fecha, el nivel de batería, el símbolo de alarma activada, AM/PM (si hemos elegido el ver la hora en formato 12 horas), DST (si estamos en el horario de verano), la hora, el día de la semana o bien la zona horaria en la que nos encontramos y el indicador de que ha sincronizado en el día:
Tras la hora pasamos a la hora mundial, modo en el cual la pantalla nos muestra lo mismo que en el modo anterior salvo en la línea inferior, en la que aparecen tres letras indicando la ciudad de la zona horaria, las horas de diferencia respecto a la UTC y la hora de dicha zona. Sobre esta última, en el caso de que hayamos elegido el formato 12 horas aparece un indicador AM/PM.
Una pulsación al botón MODE nos lleva a la función de alarma que nos permite programar tres horas a las que avisarnos durante diez segundos con un sonido bastante audible. La activación de las alarmas se indica con dos iconos, uno bajo el indicador del nivel de la batería que se muestra en todos los modos del reloj y otro a la derecha de la hora de la alarma activada con la grafía “ON”. Este modo, a diferencia de muchos otros relojes digitales no tiene señal horaria ni función de repetición de la alarma tras unos minutos (snooze).
A continuación pasamos al modo cronógrafo, con un tope de 9 horas, 59 minutos, 59 segundos y 99 centésimas de segundo. Cuando esta función está en marcha, en todos los modos del reloj nos aparece un icono de un corredor parpadeando y si detenemos la cuenta sale un rótulo de STOP en lugar del corredor visible sólo en el modo cronógrafo.
Seguida al cronógrafo tenemos la cuenta regresiva, con los mismos límites que el cronógrafo excepto las centésimas de segundo, pero el mínimo intervalo que se puede marcar es de un minuto. Al igual que el cronógrafo hay un icono visible en todos los modos del reloj cuando la cuenta atrás está en marcha, para mí el icono es una especie de gota dentro de un círculo, no sé describirlo mejor. Si detenemos la cuenta nos aparecerá únicamente en este modo el rótulo STOP en lugar del icono de marcha.
Una nueva pulsada al MODE nos devuelve a la hora normal, pero aún podemos movernos a otro modo del reloj, la función radiocontrolada, pulsando SET+. En este modo se nos muestra la hora y fecha de la última sincronización, la señal con la que lo hizo en el código habitual (GE77, UK60…) y GET o ERR en función de si el último intento ha sido fallido. Si mantenemos pulsado el botón con el que se entra en el modo el reloj pasa a intentar una sincronización sin tener que hacer nada más, es decir, el reloj está siempre en modo automático y si se lo pedimos hace una sincronización manual y una vez terminada regresa al modo automático él solo.
Para terminar con el módulo hay que hablar de pequeños detalles muy interesantes, uno de ellos es que en el ajuste permite elegir el contraste del LCD entre siete niveles diferentes, otro es que en todos los modos del reloj está visible la hora local en la parte superior de la pantalla (AM/PM HH:MM) excepto en los modos de hora y hora mundial en la que aparece en la posición normal en el centro de la pantalla mostrando los elementos de la función normal salvo la línea inferior de la pantalla donde se ven en el modo de hora mundial la zona horaria correspondiente. Por último la luz, el LCD está retroiluminado en color azul y su brillo es un poco pobre comparado con otras marcas, EMHO es lo suficientemente brillante para verse en la oscuridad sin deslumbrar.
Ahora antes de pasar a hablaros de la caja hacemos una pausa (podéis ir al baño o a por algo a la nevera, por ejemplo) y os dejo con un anuncio:
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La caja, ni grande ni pequeña, de 41 mm de ancho, 40 entre garras y 10’5 mm de grosor, hecha en acero inoxidable cepillado (con posibilidad de acabado en PVD); está cerrada con una tapa a presión y tarada para aguantar una presión máxima de 10 bar (100 m). Es el elemento más significativo del diseño del reloj, rectangular pero sin aristas vivas, con un diseño nuevo y a la vez de lo más setentero/geek. Vista desde casi cualquier ángulo se ensancha en su parte media y tiene unos costados ni rectos ni curvos, sino todo lo contrario, es decir, EMHO son rectas hechas curvas y aristas ligeramente matadas, para mí un acabado muy curioso. El cristal del reloj es el archiconocido Hardlex de Seiko, cristal mineral endurecido y que, en este caso, va colocado enrasado con los bordes de la caja.
El brazalete que lleva este reloj tiene el mismo acabado que la caja, acero inoxidable cepillado, manteniendo el mismo diseño que el prototipo de 2006 y que los modelos de hace años. Prolongando las líneas de la caja se acopla a ella con una anchura de 22 mm la cual se va reduciendo hasta los 20 mm poco antes del cierre desplegable. En realidad el armis es de 20 mm, es decir, la pieza que lleva el pasador y que se introduce en el hueco correspondiente de la caja tiene esa medida y la unión se hace mediante pasadores normales. La factura de este brazalete está en consonancia con el resto del reloj y de modelos de la marca, en mi opinión es un armis estupendo y muy cómodo.
En fin, es un trasto que a mí me ha gustado muchísimo, por 215 € al cambio me parece un reloj diferente, muy bien hecho, válido para el día a día y toda una frikada…
Espero que os haya gustado.