CITIZEN PROMASTER TOUGH ‘RAY MEARS’
La primera vez que vi este reloj fue en su versión Royal Marine Commandos y me llamó poderosamente la atención. Yo no tenía idea de quién era Ray Mears, pero nada más verlo, entendí perfectamente que no se trataba de la forma sino de la función lo que me atraía. Su presencia me transmitió la confianza de estar frente a un instrumento capaz poder cumplir siempre y en cualquier circunstancia con la misión para la que había sido creado. Sin adornos.
Un reloj robusto, simple de formas, con numerales enormes, agujas blancas y en ligero titanio. Me gustó nada más verlo.
Ahondando en el tema, encontré la historia del reloj, y me di cuenta de que no estaba solo. Pues son relojes muy apreciados y buscados para ser un cuarzo solar. Y a pesar de que estuvo en producción hasta 2007, las primeras series no son relojes fáciles de encontrar pues sus poseedores no los sueltan muy a menudo.
El caso es que, para mi sorpresa, conseguí encontrar un original de las primeras unidades, de Septiembre 1998 según nº de serie, y en un estado de conservación excelente gracias al Duratect y al zafiro. Así que no lo pensé mucho y fui a por él… Tan solo necesitó de un sencillo mantenimiento y un cambio de acumulador para volver a estar tan en forma como si 25 años no hubieran pasado por él.
Haciendo honor a su nombre. Tough (Duro): (por definición: strong enough to withstand adverse conditions or rough or careless handling.)
Un excelente reloj de diario, para todo uso. Discreto, cómodo e infalible.
Mi único pero, puede venir precisamente por eso también, es demasiado discreto, pues me suele gustar rotar relojes con algo más de presencia por peso y diámetro, y algo más llamativos. Vamos, que aunque entre poco en la rotación, me encanta el concepto… Pero dentro del mismo estilo suelo preferir antes un diver.
Un poco de historia
En 1989, Citizen lanzó su gama de relojes profesional denominada Promaster. Con un logo de diseñó muy similar al marcaje “arrow” utilizado para los suministros específicos del ejército británico. Lanzaron varios modelos orientados principalmente al buceo y a la aviación, que rápidamente adquirieron -y hoy en día mantienen- una buena reputación y éxito de ventas.
Poco más tarde, en 1995 apareció la línea Eco-Drive alimentada por luz. El concepto Eco-Drive introdujo varias mejoras técnicas con respecto a los relojes solares anteriores, introduciendo unas discretas células capturadoras de luz (incluso artificial), que podían hacerse prácticamente invisibles detrás de la esfera, mejorando la apariencia del reloj.
Estos primeros movimientos Eco-Drive, empleaban como acumuladores para almacenar la energía eléctrica, unas baterías recargables de iones de litio-titanio, que permitían que los calibres funcionaran durante 180 días antes de necesitar recargarse de nuevo con luz, lo que suponía una mejora notable con respecto a los anteriores relojes de carga solar. La precisión del movimiento de cuarzo se afirmó en ± 20 segundos por mes, en un rango de temperatura normal, y también tenían un indicador de carga insuficiente por salto de segundos.
La tecnología Eco-Drive de carga de solar “apenas” necesitaba mantenimiento. Y digo “apenas”, porque según Citizen, los datos experimentales demostraron que las células solares y el acumulador podían durar más de 10 años. Y según Citizen Europa, las pruebas de laboratorio demostraban que después de 20 años de uso, los acumuladores aún podrían conservar una capacidad de almacenamiento de energía del 80% de su capacidad inicial.
Pero no son eternos, ya que si bien hay unidades que sin mantenimiento han aguantado nada menos que 25 años sin pestañear. También hay casos en los que, operando en condiciones inadecuadas, han fallado por agotamiento los acumuladores (como en cualquier otro reloj), y los servicios oficiales Citizen, lamentablemente no se han hecho cargo de la sustitución, argumentando la falta de repuestos ya que solo mantienen fornituras específicas durante 7 años después de cesar la comercialización.
Afortunadamente aún es posible conseguir los primeros acumuladores MT920 (295-5600) y sustituirlos por cuenta propia.
Mantener los Eco-Drive en plena forma es tan sencillo como no dejar que descarguen nunca por completo. Ya que mantiene las baterías sanas, y los lubricantes utilizados estaban diseñados también para ayudar con la longevidad, ya que el aceite no se endurecería ni se evaporaría, incluso después de 20 años.
De todas maneras, Citizen recomienda cambiar las juntas en todos sus relojes sumergibles cada 2 o 3 años para preservar su resistencia al agua, porque las juntas del reloj, que forman el sello hermético se degradan a medida que envejecen. Y aunque no sea necesario, también recomiendan el mantenimiento de sus movimientos Eco-Drive a intervalos regulares, para prolongar la vida útil del movimiento.
La gama Promaster Tough
Los Tough aparecieron en 1998, representando la gama militar y de aventura. Capaces de resistir el uso profesional en las condiciones más duras, aprovechando la tecnología Eco-Drive, y una construcción y materiales de alta resistencia y durabilidad.
La carga solar Eco-Drive era vital para el uso duro al que podían ser sometidos los Tough, permitiendo que el reloj nunca detuviese su funcionamiento. Y siendo capaz de cargar incluso con luz artificial. Una carga rápida de tan solo 11 minutos en un día nublado podía proporcionar 24 horas de energía. Y una carga completa de 11 horas en condiciones óptimas, sería capaz de proporcionar una duración máxima de 6 meses.
La gama Tough adquirió fama gracias a Ray Mears, instructor de supervivencia británico, y presentador (al estilo de Bear Grillys o Calleja) de un programa de la televisión británica sobre bushcraft y aventura en los 90, que lucía en su muñeca un modelo Promaster Eco-Drive Tough. Y que involuntariamente aportó el nombre con el que los aficionados ahora denominan a este modelo en concreto. De manera que en la actualidad es más famoso el reloj que el personaje en sí…
Además ahora que ya está muy mayor, creo que se ha pasado al Submariner el muy traidor.
EL PROMASTER TOUGH “RAY MEARS”
El modelo que da nombre a la saga es el 7828-H09971 TA (PMU56-2373, AP0600-01E). Lanzado a finales de 1998 con el calibre Eco-Drive grande 7828 para el mercado europeo.
Unas medidas de 39mm de diámetro sin corona, 11mm de espesor y 20mm entre asas. Y un peso pluma de tan solo 54gr con correa (103gr con brazalete)… Como si no llevaras nada. Era el tamaño de moda en aquella época y que ahora vuelve de nuevo.
Venían con una correa de lona de kevlar con herrajes de titanio, o con brazalete de titanio como opción. Y como curiosidad, se podía pedir la trabilla de titanio de la correa, grabada con el “nombre”, “nacionalidad”, “grupo sanguíneo” y “fecha de nacimiento”, rellenando un formulario.
La esfera presentaba un gran triángulo invertido a las 12, índices rectangulares a las 6 y 9, una ventana de fecha blanca a las 3 y números gruesos. Todo con doble capa de buen material luminoso y gran tamaño.
Los índices resaltaban y contrastaban tanto sobre el cristal de la celda, que parecían aplicados en vez de pintados.
La caja era un monobloque de Dura-Titanium (más tarde llamado Super-Titanium o Duratect TIC) con acabado arenado. Este tratamiento endurecía la superficie hasta hacerla 4 veces más resistente que el titanio sin tratar, para así proteger el cuerpo del reloj de fuertes arañazos.
Al ser monobloque carece de tapa trasera y tiene un ligero rebaje entre las asas bajo el bisel para no dañar las correas. El movimiento está alojado en una estructura antimagnética no ferrosa que lo protege hasta 16.000 gauss (pensad en el pobre Milgauss).
Es a prueba de golpes y resistente al agua hasta 200m gracias a su construcción monobloque y corona roscada. La corona para poder ser operada en condiciones de barro, humedad o con guantes, era larga, moleteada y estéril.
El cristal era de zafiro extra-grueso (2,5mm) y ligeramente abombado. Con un revestimiento anti-reflectante interno, consistente en la deposición de una fina capa de fluoruro de magnesio sobre la cara interna del cristal, para evitar el reflejo de la luz y hacer que el reloj fuese fácil de leer en las peores condiciones.
En el dial se lee a las 12 CITIZEN Eco-Drive, y a las 6 el símbolo Promaster, WR 200, TITANIUM.
Y en la parte trasera se lee Eco-Drive, CITIZEN WATER RESIST, (nº de serie), ANTIMAG. 16000, TITANIUM, 7878-H16714 TA, GN-4W-UL JAPAN. (GN-4W-UL significa caja monobloque, apertura superior y junta en L.)
Las versiones equivalentes JDM (Japan Domestic Market) se distinguían en la esfera, por el símbolo Promaster en la parte superior debajo de Citizen y Eco-Drive en cursiva en la parte inferior.
Los otros ‘Ray Mears’
La referencia ‘Ray Mears’ equivalente para Japón, de 40mm con calibre 7828, es el PMU56-7371. Pero también se lanzaron modelos más pequeños con calibre 7878. Con diámetros de 36mm sin contar corona y sin el cuadrado de luminova junto al fechador.
Aquí podemos ver el catálogo Citizen de 1999 mostrando los modelos JDM. Con precios entre 33.000 yens y 50.000 yens con brazalete.
A las 6 en el dial se lee Eco-Drive, WATER 20 bar RESIST, TITANIUM.
Y en la parte trasera se lee Eco-Drive, CITIZEN WATER RESIST, (nº de serie), ANTIMAG. 16000, TITANIUM, 7878-H16714 TA, GN-4W-UL JAPAN.
También se lanzaron series especiales, como la dedicada al parque “Yellowstone”, al monte “Aoraki” (Mt. Cook), o para la marca oudoor “Montbell”
Y versiones en PVD negro sobre una base titanio anodizado en dorado.
En las sucesivas mejoras del calibre, ya con la denominación, E766 - La reserva de marcha aumentó a un año, la precisión pasó a ser de ± 50 segundos al mes. Y se incorporaron mejores funciones, como el calendario perpetuo, el ahorro de energía y la suspensión.
Con la suspensión, si se privara al reloj de luz durante un período prolongado de tiempo, las manecillas dejarían de moverse, mientras que el movimiento de cuarzo interno continuaría funcionando con precisión. Y al volver a exponerse a la luz, las manecillas se moverían a la posición correcta. Por lo tanto, un reloj almacenado, al volver a exponerse a la luz, mostraría la hora correcta inmediatamente con un mínimo consumo de la energía acumulada.
Y la otra nueva característica de ahorro de energía consistía en hacer que el minutero solo se moviese cada 15 segundos.
La esfera era similar a otras esferas ‘Ray Mears’, excepto que los rectángulos en las 6 y las 9 fueron reemplazados por pentágonos apuntados. Todos los índices eran más finos con luminova azulada, rodeados por un marco metálico aplicado.
El segundero pasó a ser metálico con punta de flecha roja y la piruleta pasó a estar hueca en vez de rellena de luminova.
Estas versiones medían 41mm o 30mm de diámetro, con acabado satinado, y esferas en negro o en azul. Fue discontinuado en 2004. Siendo sustituido por la versión PMT56-2714 con similares características y un dial más limpio sin cromados.
Las versiones RMC (Royal Marine Commandos), son otro hito para los coleccionistas por su escasez. Con las referencias BN0110-06E con correa de kevlar y BN110-57E con brazalete de titanio.
Este modelo utilizaba un movimiento E168 con las últimas mejoras y con ± 15 segundos al mes, y recuperaba las señas de identidad de los primeros ‘Ray Mears’ pero con un mayor grosor de 12mm, y resistencia al agua hasta 300m.
En vez del logo Promaster, lucían el parche de los marines británicos. Y el texto TITANIUM y SAPPHIRE junto a la fecha.
También hubo versiones en PVD negro.
Y un bonito GMT con calibre B876. El bisel era mate con los husos horarios por ciudades y moleteado como la corona. Índices aplicados y aguja GMT en rojo.
Las medidas del GMT eran de 42mm de diámetro sin corona, 22mm entre asas
La versión civil del RMC solo hora (sin los logos RMC) es la BN0118-04E, y es también la última referencia, y más fácil de encontrar. Con las mismas características que los RMC pero concentrando los textos de la esfera a las 6 con logo Promaster en vez del logo RMC. Y por fin firmado en la corona.
La versión con brazalete es la BN0118-55E.
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Hay más versiones de esta gran familia, como los cronos, los modelos de acero, o los ‘Garrison’, pero ya no suelen llamarlos ‘Ray Mears’ por tener distintas especificaciones o por no ajustarse el concepto de simplicidad, ligereza y resistencia.
Y hasta aquí llegó la riada…
Aunque he intentado ser sintético ha salido un buen tocho… así que espero no haberos aburrido mucho. Y que podáis apreciar como yo, un reloj tan duro y sencillo, que su principal atractivo es la falta de atractivo… Y que aun siendo de cuarzo, puede cumplir y ser tan duradero como un mecánico.
Sé que un cuarzo solar generalista puede ser algo controvertido entre aficionados o coleccionistas…
Así que espero ansioso vuestros comentarios y críticas sobre qué os parece el reloj.
Un abrazo y gracias por leer. 
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