La propuesta para este hilo sería hacer una “panoplia” con relojes militares (piloto, field, etc.) con algún elemento alusivo, un libro, una insignia, una fotografía.
El cuadro es una de las joyas de mi colección, dado que la firma de abajo es de Adolf Galland, y la de arriba de Erich Hartmann, ambas firmas auténticas y certificadas, obviamente de la postguerra y cuando ya eran muy mayores.
Como por aquí todos sois muy frikis del tema histórico militar, no hacen falta muchas explicaciones, pero Galland es quizás el piloto de caza más carismatico de la Luftwaffe y Hartmann derribó 352 aparatos enemigos, el mejor piloto de caza de la historia.
Galland es mi ídolo, con su mostacho y el puro, un aventurero nato que podría haber sido el protagonista de Porco Rosso. Pero el tío era nazi de narices, que conste.
Y los relojes, como se dice por aqui, Only RSWC (¡Viva!)
¡Uno de mis libros de cabecera! El militar alemán más condecorado, de su cruz de caballero no podían colgar más cosas (hojas de roble, espadas, diamantes) y no se podía ser más nazi. Quinientos tanques y hasta un acorazado ruso en su haber. Que tio…
¡Y cuidadito con la nostalgia de boomers que desempolvo los libros de Sven Hassel! Otra joya de mi colección es el libro “Monte Cassino” firmado por él, en El Corte Inglés de Diagonal hace mil quinientos años.
11 en mi caso…me lo pasé muy bien leyendo sus libros.Los buenos eran los primeros…los últimos que sacó no valían mucho.Los primeros eran los autobiográficos…“la Legión de los condenados” y “Los panzer de la muerte” son los mejores para mi gusto.
Otra vez batallitas barcelonesas, pero es que el tío vivía en Castelldefels. El Viejo, Heide, el Legionario, el Coronel Hinka y el ¿General? Mercedes… un batallón disciplinario montando Tigers, juassss…
¡Barcelona Blum! Moría en casi cada libro. Llevaba una naranja española en el bolsillo, disecada, y la primera vez que salió, tras morir, decían que no había estado en España nunca. Una vez se instaló Hassel en Barcelona y conoció el paisaje, el personaje se hizo de las Brigadas Internacionales y hasta tuvo una novia fusilada por los estalinistas, la repera.
Te prometo que lo mataba cada dos libros, en uno lo enviaban al hospital gravísimo y en el siguiente moría dentro de un tanque. Era prodigioso que su batallón estuviera en todos los frentes y todas las batallas importantes de la guerra, excepto en África, y porque hunden el barco en el que los llevaban a Libia.
Todo es mentira pero con una interesante profundidad de detalles. Por algún lado leí que el tío había estado después de la guerra en la cárcel Dinamarca, su país, y que allí había conocido a veteranos de la división SS Wiking, que le habían explicado las batallitas.
No os lo vais a creer, pero yo tenía un tío, alemán, primo de mi padre, que luchó en la Lufwaffe en el frente ruso. Como tenía primos franceses (también primos de mi padre), pudo elegir si iba al frente occidental o al oriental. Tras la guerra acabó en Madrid y yo lo conocí hasta que murió en un accidente aéreo en África. Otra gran historia.